El hogar no es simplemente una marca en un mapa, igual que un río no es sólo agua, es el lugar que hay en el centro de la brújula de nuestra vida desde el que salen todas las agujas y donde el corazón está fijado. Es una fuerza que nos incita siempre a volver o nos empuja a seguir nuestro camino, ya que allí donde hay un hogar hay esperanza y aguarda un futuro en el que todo es posible.
El hogar es el lugar al que siempre regresamos, donde nos sentimos realmente seguros y donde nos llenamos de fuerza para enfrentar los avatares de la vida. Sin hogar, sin raíces, no somos nada.
Encuentra tu propio hogar, el sitio idóneo para plantarte y echar raíces, porque siempre será el lugar al que desees volver cuando te sientas confuso o perdido.
NO OLVIDES QUE DONDE ESTÁ TU HOGAR
ESTARÁ TU CORAZÓN.